Xbox Series X, especificaciones técnicas y características: retrocompatibilidad, 1TB y 12 teraflops

Xbox

Desvelados todos los detalles y funciones de Xbox Series X: potencia, velocidad y retrocompatibilidad

Está claro que la guerra de consolas está muy reñida entre las tres grandes. Con Sony y Microsoft preparando el lanzamiento de la nueva generación de consolas, es Xbox la que ha dado el primer paso, mostrándonos cómo funcionará su Xbox Series X. Y no pinta nada mal...

Por David Gómez  |  27 Febrero 2020

A finales de 2020 saldrán a la venta las consolas de próxima generación, y poco a poco se van calentando la guerra entre las marcas. Con Sony manteniéndose en el secretismo, aumentando cada día los rumores sobre la próxima PlayStation 5, nos queda Microsoft y su Xbox Series X. La nueva consola de la gigante estadounidense nos ha dado importantes detalles sobre cómo será, adelantando a los japoneses en ese aspecto y poniendo el listón muy alto. Ya conocíamos parte de su arquitectura, pero se han desvelado la potencia, algunos componentes y funciones interesantes de la próxima consola de Xbox.

Ya en el E3 de 2019 pudimos conocer la existencia de una nueva consola para finales de este 2020, así como algunas características técnicas y el nombre provisional de Project Scarlett, pero no fue hasta los Games Awards de diciembre (los Oscars de los videojuegos) cuando tendríamos más detalles de la máquina, entre ellos su nombre, su diseño externo con forma de torre de ordenador, y varios detalles del procesador. Ahora, y por sorpresa, Xbox ha soltado una buena cantidad de información sobre Xbox Series X. Vamos con ello.

El balance entre potencia y velocidad

De esta manera, en el blog oficial de Xbox, y bajo la firma de Phil Spencer (principal responsable de la marca), aparecía un artículo bastante extenso que detallaba nuevos detalles de su consola de nueva generación, la Xbox Series X. Así pues, se confirman algunos de los rumores más sonados de la máquina, concretamente aquellos que aluden directamente a la cantidad de Teraflops y algunas funciones de Xbox One que podían regresar. Entrando ya en detalle, el artículo se dividía en varios puntos donde se trataban diferentes aspectos. El primero de ellos tenía que ver con detalles relativos a su potencia, el raytracing generado por hardware y el sombreado de velocidad variable.

Comenzaban con el procesador, que se trata de uno personalizado para Xbox Series X. En palabras del propio Phil Spencer, es su consola más poderosa jamás fabricada, alimentada por el procesador de diseño personalizado que aprovecha las últimas arquitecturas Zen 2 y RDNA 2 de AMD. Brinda cuatro veces la potencia de procesamiento de una Xbox One y permite a los desarrolladores aprovechar 12 TFLOPS de rendimiento de GPU (Unidad de procesamiento de gráficos), el doble que una Xbox One X y más de ocho veces la Xbox One original. Xbox Series X ofrece un verdadero salto generacional en potencia de procesamiento y gráficos con técnicas de vanguardia que dan como resultado una mayor cantidad de imágenes por segundo, mundos más grandes y sofisticados, y una experiencia inmersiva diferente a todo lo que se haya visto en los videojuegos de consola.

En cuanto a la memoria RAM de la consola, montará 16 GB GDDR, acompañando así a la GPU con 10 de ellos óptimos, ofreciendo hasta un ancho de banda de hasta 560 GB/s, y los otros 6 GB son memoria estándar con un ancho de banda de 336 GB/s. Y, para que el sistema operativo funcione correctamente, 2,5 GB de éstos últimos se dedican especialmente a ello. Todo ello se verá refrigerado por la nueva versión de la cámara de vapor, introducida por primera vez en Xbox One X. Se tratará de una ventilación única que se sitúa en la parte superior de la consola y ocupará 130 mm.

Lo segundo es algo que denominan como Variable Rate Shading (VRS), que según ellos permite a los desarrolladores utilizar de manera más eficiente toda la potencia de la Xbox Series X. En lugar de gastar ciclos de la GPU de manera uniforme en cada píxel de la pantalla, pueden priorizar efectos individuales en personajes u objetos ambientales importantes. Esta técnica da como resultado mayores frames por segundo y una resolución más alta, sin impacto en la calidad de imagen final.

Lo más visto

Por último, el Raytracing no podía faltar en las consolas de nueva generación. La Xbox Series X tendrá el Raytracing de DirectX acelerado por hardware, con el cual podremos esperar entornos más dinámicos y realistas impulsados por esta tecnología, siendo esta la primera consola en utilizarlo. Esto significa iluminación más realista, reflejos precisos y mejor acústica, todo ello en tiempo real mientras exploramos el mundo del videojuego.

12 Teraflops, Raytracing por software o Smart Delivery son algunas de las impresionantes características de Xbox Series X.
12 Teraflops, Raytracing por software o Smart Delivery son algunas de las impresionantes características de Xbox Series X. Xbox

Inmersión en un instante

El segundo punto del artículo del blog oficial de Xbox trata sobre la inmersión y la velocidad de la misma. La consola de próxima generación de Microsoft tiene como objetivo jugar más y esperar menos. Y cuando el juego comienza, hay muchos jugadores que demandan una latencia mucho más baja para que la inmersión sea lo más precisa posible. De este modo, el equipo detrás de Xbox Series X han analizado la relación entre el jugador y el juego, y preguntándose cómo podría ser más rápido.

La solución, cambiar el disco duro por uno de estado sólido (SSD). Con el SSD de próxima generación se mejoran casi todos los aspectos de los juegos. Los mundos son más grandes, más dinámicos y se cargan en un instante, y el viaje rápido es solo eso: rápido. Además, han incluido la función 'Resumen rápido', que permite continuar múltiples juegos desde un estado suspendido casi instantáneamente, permitiéndonos seguir donde estábamos sin tener que esperar otra vez en esas largas pantallas de carga. Se tratará de una unidad SSD de 1 TB que aprovechará el estándar PCIe 4.0, con el que será posible lograr tasas de 2,4 GB/s de datos en bruto y 4,8 GB/s de datos comprimidos, que dejan muy atrás a los viejos discos duros de Xbox One, tal y como se puede ver en el siguiente vídeo.

Contará con la posibilidad de conectar una unidad USB pero no nos permitirá almacenar juegos de Xbox Series X en su interior, sino que se dedicará exclusivamente para los juegos de generaciones anteriores. De esta manera, se garantiza que los juegos de Xbox Series X funcionen correctamente gracias al salto generacional que se espera con respecto a las consolas anteriores. Además, desde Microsoft nos permitirá comprar unas tarjetas de 1 TB de capacidad para aumentar el alamcenamiento de Xbox Series X si nos quedásemos sin espacio.

Además, como decíamos, uno de los puntos más importantes también es la de reducir la latencia. Lo han conseguido con la Dynamic Latency Input (DLI), que funciona en el nuevo mando, el Xbox Controller, mediante una comunicación inalámbrica. Gracias a esta nueva característica, se sincroniza inmediatamente el dispositivo de entrada con lo que se ve en pantalla, consiguiendo que los mandos sean aún más precisos.

Por otro lado, en Xbox también confían en la innovación que supone el HDMI 2.1, y han decidido implementarlo en la nueva consola. Microsoft se ha asociado con los creadores del HDMI y los fabricantes de televisores para conseguir la mejor experiencia de juego a través de características como el Auto Low Latency Mode (Modo de Baja Latencia Automática) y Variable Refresh Rate (Tasa de Refresco Variable). El Auto Low Latency Mode permite que Xbox One y Xbox Series X configuren automáticamente la pantalla conectada en su modo de latencia más bajo. Por su lado, el Variable Refresh Rate sincroniza la tasa de refresco de la pantalla con las imágenes por segundo del juego, consiguiendo así imágenes más suaves. Todo ello lo hacen garantizando un input lag mínimo y la experiencia de juego que mejor responda a lo que hacemos con el mando.

Por último en este segundo punto, confirman algo que alegrará a los jugadores mas competitivos: el soporte para los 120 frames por segundo, que permite a los desarrolladores exceder el estándar actual de 60 cuadros en favor de una acción mucho más rápida y realista.

Phil Spencer subió como foto de perfil de Twitter el cerebro de la máquina.
Phil Spencer subió como foto de perfil de Twitter el cerebro de la máquina. Twitter: Phil Spencer

La generación de la retrocompatibilidad

Tanto la Xbox Series X como la PlayStation 5 apuestan de forma clara por la compatibilidad. En el caso de la consola de Microsoft, se han desgranado tres apartados clave:

  • Esta nueva Xbox llevará a sus espaldas cuatro generaciones de videojuegos. En ese compromiso del que hablaban entra la retrocompatibilidad con los juegos de Xbox One, Xbox 360 y la Xbox original. De este modo, todos los juegos favoritos de la comunidad, incluso los del Xbox Game Pass, se beneficiarán de velocidades de fotograbas más estables, tiempos de carga más rápidos y mejoras en la resolución y la fidelidad visual (todo ello sin necesidad de trabajo extra por parte de los desarrolladores). Esto también hace alusión a los accesorios de Xbox One, también compatibles con la nueva máquina de Microsoft.
  • La nueva tecnología Smart Delivery, con la cual permite que siempre que compremos un juego, no tengamos que pagar por una versión mejorada del mismo. Tanto si jugamos en Xbox One como en Xbox Series X, siempre tendremos la versión correcta con respecto a nuestro hardware. Pretenden que dicha función valga para todos los juegos exclusivos de Xbox Game Studios, incluido el nuevo 'Halo Infinite', asegurándose así que solo tengas que adquirir el producto una vez. Esta tecnología está disponible para todos los desarrolladores y distribuidoras, que podrán elegir qué juegos llegan primero a Xbox One y posteriormente a Series X. Sin ir más lejos, CD Projekt Red, que actualmente están desarrollando 'Cyberpunk 2077', ya han confirmado que se acogerán a este modelo de negocio.
  • Halo Infinite será uno de los juegos de lanzamiento de Xbox Series X, pero también estará en Game Pass.
    Halo Infinite será uno de los juegos de lanzamiento de Xbox Series X, pero también estará en Game Pass. Xbox
  • El Xbox Game Pass, su servicio de suscripción líder, continuará brindando sus juegos first-party, como 'Halo Infinite', de salida. Esperan así que millones de jugadores en todo el mundo puedan disfrutar del catálogo de gran calidad del que disponen, y descubran sus nuevas aventuras.

Los jugadores serán el centro de todo. Desde la potencia hasta los servicios que prepara Microsoft (incluido el juego en la nube de Project X Cloud), representan un compromiso único con los jugadores y los juegos. Y nosotros encantados, pero, sobre todo, con mucho hype.

Disponibilidad y precio de la Xbox Series X

Xbox Series X saldrá a la venta el 10 de noviembre a un precio de 499 euros. Las reservas comienzan el 22 de septiembre.

Artículos recomendados