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Facebook: Cómo conectarse y activar los ajustes de seguridad
Filtraciones, accesos no autorizados... la seguridad de Facebook se han convertido en un problema para el que hay muchas soluciones. Repasamos cómo debes actuar para proteger tu cuenta en esta red social y que tus datos, fotos y contactosa estén más seguros.
| 07 Agosto 2018
Ahora que las redes sociales no son tan seguras como nos las pintaban al principio, los usuarios tenemos que hacer uso de todas las herramientas que las propias plataformas tienen (pero que no sabemos utilizar), para levantar escudos y que nuestros datos, simplemente, no salgan volando a la primera de cambio. Facebook es una de las redes más utilizadas en todo el mundo, pero ahora es también una de las que más desconfianza genera debido al escándalo de Cambridge Analytica, en el cual millones de usuarios vieron expuestos sus datos para una campaña electoral norteamericana.
La compañía de Mark Zuckerberg no es un mercado negro de información, ni mucho menos, y desde que se desvelaron estos hechos, se han fortificado y simplificado los sistemas de seguridad para que todos los usuarios podamos entenderlos y, además, aplicarlos. Con este reportaje queremos explicaros cómo activar las defensas que ofrece Facebook para que seáis vosotros mismos los que podáis gestionar vuestra privacidad, ya no solo de cara a posibles escándalos, sino también antes posibles ataques y ojos no bienvenidos a vuestros contenidos.
Facebook está disponible en diferentes plataformas y nosotros vamos a explicar de manera sencilla y con imágenes cómo realizar diferentes ajustes para poder iniciar sesión de una manera fácil y segura con la autentificación en dos pasos y también a publicar contenidos con un público más acotado, ya que aunque el objetivo de esta red social es llegar a cuanta más gente mejor, hay ciertos momentos en los que es posible que queramos limitar el número de personas que pueden acceder a nuestras publicaciones.
Versión web
Una vez hayamos iniciado sesión de manera normal, tenemos que dirigirnos hacia la parte superior del portal hasta localizar la pestaña en la que se puede acceder a la configuración de la red social. Esta zona es fácilmente reconocible, ya que es una flecha (al lado del icono de interrogación) que se encuentra a la derecha de la zona de notificaciones. (Imagen 1). Al abrir el menú desplegable, solo tenemos que dirigirnos a "Configuración" y, entonces, seleccionar "Seguridad e inicio de sesión" en el menú vertical de la izquierda.
Aquí dentro encontraremos la mayoría de opciones que permiten al usuario modificar el modo de iniciar sesión en la red social. Todos ellos buscan la forma de garantizar la máxima seguridad posible al acceder con nuestros datos y también alternativas a la ya más que anticuada contraseña alfanumérica. Nuestro objetivo es darle a la plataforma una doble barrera para que, en caso de alguien ajeno quiera acceder a nuestra cuenta, a nosotros nos llegue un aviso al móvil o a cualquier otra plataforma, para estar al tanto de este evento.
Justo en el menú de "Seguridad e inicio de sesión" tendremos que localizar en la parte inferior la opción de "Usar la autentificación en dos pasos". Una vez seleccionada, tendremos que seleccionar el método para que la aplicación nos avise de los inicios de sesión extraños y también para que nos envíe un código para acceder a Facebook. Nosotros hemos escogido (y recomendamos) el aviso a través de SMS. Añadiendo el teléfono móvil, recibiremos todos los datos a través de un mensaje de texto. La otra opción pide la descarga de una aplicación que puede ser más complicado debido a que también habría que saber utilizarla.
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El proceso para la activación nos pedirá el número de teléfono y un paso extra para autentificar que ese número está operativo y funciona correctamente. Nos enviarán al móvil un mensaje con un código que habrá que introducir. Tras esto, habremos finalizado la fortificación del inicio de sesión de Facebook.
Para móviles: iOS y Android
Este proceso se puede llevar a cabo tanto desde la versión de escritorio de Facebook como desde la aplicación para iOS y Android. La gran mayoría de usuarios accede a esta red social desde las versiones portátiles, por lo que es bueno saber también cómo aplicar esta misma fórmula desde nuestro terminal. Tanto si tenéis Android como iOS, los pasos a seguir son básicamente los mismos (aunque las imágenes pertenezcan a una versión con el sistema de Apple).
Como en la ocasión anterior, tendremos que localizar la pestaña de configuración, la cual aparecerá si accedemos al menú de Facebook. Este menú está representado con el icono de tres rayas horizontales en la parte derecha e inferior de la aplicación. Está justo al lado, como antes, de la campana de notificaciones. Dentro, tendremos que localizar la sección "Configuración y Privacidad" y, luego, "Configuración". Finalmente, tendremos que seleccionar la opción "Seguridad e Inicio de sesión" y seguir los pasos indicados en la versión para escritorio para tener una identificación en dos pasos que nos proteja la cuenta de manos no deseadas.
Pon límites a Facebook
Pero esto puede no ser lo único que tengamos que hacer dentro de la red social para asegurar nuestras fronteras. Aunque lo ideal es eliminar a todas aquellas personas que no queramos que formen parte de nuestras amistades, Facebook se convierte muchas veces en un remolino de intereses más complejo de lo que nos podemos imaginar. Para esta situación, la red social también tiene una opción sencilla: los grupos privados. Esto lleva existiendo desde hace mucho, ya que de esta forma se acotan los contenidos que aparecen en él y te aseguras de que llegan a todas las personas que tú quieres, porque son las que están dentro.
Para crear un grupo, tendremos que ir, de nuevo a la flecha donde se encontraba la configuración de Facebook, solo que esta vez tendremos que seleccionar "Crear Grupo". Una vez hecho esto, nos aparecerá una nueva pestaña en la que podremos definir los parámetros de nuestro círculo cerrado de contenidos: nombre del grupo, si pertenece a otros grupos o no, los usuarios que queremos que formen parte de él, etc. Facebook da una serie de opciones que permiten definir la apertura social del grupo, es decir, si es abierto, cerrado o secreto. Este último no es visible salvo por aquellos que son miembros, mientras que el cerrado es visible, pero solo pueden acceder aquellos que tengan una invitación.
Si en principio no has seleccionado a todas las personas que realmente quieres que formen parte de tu grupo privado, no hay problema. Desde la propia página del grupo se puede invitar a más personas para que pasen a conocer todo lo que se cuece dentro de ese coto cerrado de amistades. Entre las ventajas principales de este sistema, se encuentra la posibilidad de generar contenido específico para esas personas, bien por temática, bien por intereses comunes, algo que viene bastante bien si tenemos en cuenta que en Facebook los límites son pocos y, aunque nos encontremos con elementos solo de nuestros amigos, estos pueden llegar a ser demasiados.
La red social de Marck Zuckerberg no pone límites al número de grupos a crear, por lo que los usuarios pueden elegir cuáles y cuántos quieren abrir para tener perfectamente controlados sus contenidos y mejor organizado su feed dentro de este mar de publicaciones que es Facebook. Al igual que se puede crear un grupo cerrado, posteriormente se puede cambiar su configuración de privacidad para que puedan sumarse todos los que quieran o, por el contrario, sacarlo de la vista de todos.