¿Qué diferencias hay entre Google Pixel 6 y Google Pixel 6 Pro? ¿Cuál merece la pena comprar?
Hay 250 euros de diferencia entre Google Pixel 6 y Google Pixel 6 Pro. ¿Vale la pena ahorrar más e irse a por la versión premium, o la estándar es más que suficiente?
20 Octubre 2021
|La tan esperada revolución de Google ha llegado con la sexta generación de los Pixel, que por primera vez en mucho tiempo pueden llegar a competir de tú a tú con los principales nombres de la gama alta en todos los apartados y no solo en el fotográfico, como sucedía últimamente.
Los Pixel 6 y Pixel 6 Pro han aterrizado en unos pocos países del mundo con ganas de dar guerra, pero con amplias diferencias de precio entre ambos: de los 649 euros de punto de partida del Pixel 6 pasamos a los 899€ del Pixel 6 Pro. Sabiendo el buen rendimiento que Google suele otorgar a la versión estándar de los Pixel, ¿será suficiente con el Pixel 6 o este año sí que es necesario ahorrar más y apostar por el Pixel 6 Pro? Salimos de dudas mostrando las similitudes y diferencias de ambos modelos, y sacamos nuestras propias conclusiones.
Dimensiones | ||
Pantalla | ||
Procesador | ||
Sistema operativo | ||
Memoria | ||
Batería | ||
Cámara | ||
Conectividad | ||
Precio |
Similitudes: Google Tensor, fotografía computacional...
Empecemos por los puntos en común. El principal, el procesador. Google sigue los pasos de Apple en la creación de un chip propio, Tensor, que se estrena en los Pixel 6. Este promete ser un 80% más potente que el Snapdragon 765 que lucía el Pixel 5, lo cual podría situar esta primera generación de Tensor a la altura de un Snapdragon 888, por compararlo con los chips más conocidos y que se entienda mejor.
El otro gran aspecto que comparten Pixel 6 y Pixel 6 Pro tiene que ver con la cámara. No en el número de lentes, como veremos más adelante, sino en ese término que lleva ligado a los Pixel desde hace años y que explica el porqué de su leyenda: la fotografía computacional.
Lo más visto
El software vuelve a hacer maravillas, y en los dos modelos analiza la fotografía separando los elementos de cada imagen, trabajando individualmente sobre ellos. Gracias a esta función tenemos 'Face Unblur', con la que aportaremos nitidez a un rostro desenfocado, así como la opción de borrar objetos y personas que nos impidan tener la foto perfecta a través de Google Fotos. Y sí, por supuesto, una calidad diferencial en las instantáneas.
Más allá del chip y de las funciones de las cámaras, los dos Pixel poseen la misma carga rápida de 30W, la misma conectividad y la presencia de Android 12 bajo la capa Pixel UI.
Diferencias: diseño, pantalla, cámaras, memoria, rendimiento...
Que sean lo suficientemente importantes es otro tema, pero tampoco vamos a negar la evidencia: los Pixel 6 y Pixel 6 Pro se diferencian en muchos aspectos.
Empecemos por el diseño y la pantalla. En ambos, el Pro luce más grande. Mide más, pesa (muy poco) más y cuenta con 6,71 pulgadas en lugar de las 6,4" del Pixel 6. Y luego está el asunto de los bordes. En el Pixel 6, los marcos son gruesos para lo que estamos acostumbrados actualmente. Mucho más finos lucen en el Pixel 6 Pro, hasta el punto de que la pantalla es curva. Esta es la gran diferencia estética entre ambos modelos, más visible que el tamaño a simple vista.
Centrándonos en el panel, el del Pro es de tipo LTPO, lo que permite una tasa adaptativa de refresco de entre 10 Hz y 120 Hz, algo que no vemos en el Pixel 6, con tasa de refresco de 90 Hz. La resolución también es distinta: la versión estándar es FullHD+ (2.400 x 1.080 px), mientras que en la Pro estamos ante un Quad HD+ (3.120 x 1.440 px).
¿Qué hay del rendimiento? A pesar de incluir el mismo procesador, en el Pro se ha aprovechado más y mejor. Los 12 GB de RAM llegan por primera vez a un Pixel, y lo hacen con el Pixel 6 Pro (el Pixel 6 se queda en unos buenos 8 GB). El almacenamiento del Pro ofrece una tercera versión de 512 GB, acompañada de las de 128 GB y 256 GB que aparecen también en el Pixel 6. Además, la batería alcanza en el modelo premium los 5.000 mAh (5.003, para ser exactos), contra los 4.614 mAh del Pixel 6. Victoria del Pro en los tres parámetros. Otra cosa es que estas victorias sirvan para algo al usuario medio.
Lo más nuevo
Seguro que valorarán en mayor medida las diferencias en las cámaras. Aunque el poder de la fotografía computacional no varía, y el sensor principal (50 MP) y el gran angular (12 MP) son idénticos, el Pixel 6 Pro añade una tercera cámara. Y menuda cámara. Hablamos de un teleobjetivo de 48 megapixeles con cuatro aumentos ópticos. Señoras, señores, este es el tipo de cosas que distinguen a un smartphone de gama alta a uno de gama premium.
Y ojo, porque aunque todas las portadas se las lleve esta tercera lente, no debemos pasar por alto que la cámara frontal del Pro es superior al del estándar (11,1 MP, f/2.2 y 94º vs. 8 MP, f/2.0 y 84º). No es hay una distancia abismal entre ambos, pero todo suma.
Y entonces, ¿vale la pena gastarse más dinero por el Pixel 6 Pro?
La pregunta atiende muchos factores, y depende del partido que cada uno quiera sacarle a su smartphone. Objetivamente, sí hay mejoras suficientes que justifiquen pasar al Pixel 6 Pro, sobre todo en lo que respecta a huir de los molestos bordes, a una pantalla más grande y de mejor calidad y, por encima de todas las cosas, contar con ese teleobjetivo de cuatro aumentos.
No obstante, si buscas algo más compacto (aunque sigue siendo enorme para los más puristas) con un rendimiento que nada tiene que envidiarle al iPhone 13 estándar, y el zoom en las fotos es algo secundario para ti, mejor ahórrate esos 250 euros y hazte con el Pixel 6. La pantalla es buena, no notarás diferencias en la calidad de las fotos gracias a la fotografía computacional (a falta de saber hasta qué punto incidirá unas peores especificaciones en la cámara frontal), y el rendimiento, aunque sea con la versión 8+128 GB, está asegurado con Google Tensor.
Y tú, ¿con qué Pixel 6 te quedas?