Llega el futuro: Estados Unidos crea un arma capaz de enviar mensajes directamente al cerebro

Se ha publicado un vídeo filtrado del departamento militar de Estados Unidos en el que se muestra un nuevo dispositivo en desarrollo. En este material se puede diferenciar un aparato electrónico que desarrolla una luz con la que pueden hacer llegar mensajes a los cerebros de las personas expuestas. Este dispositivo es capaz de transmitir fragmentos claros de lenguaje humano a largas distancias.

Lejos de que esta nueva técnica nos recuerde a los Hombres de Negro y su luz que provocaba amnesia, se trata de uno de los proyectos que están siendo desarrollados por el Pentágono en este momento. Forma parte de una iniciativa militar llamada Dirección Conjunta de Armas No Letales (JNLWP por sus siglas en inglés).

Para iniciar su funcionamiento, este arma utiliza un principio llamado "efecto inducido por láser", el cual consiste en disparar haces de luz muy potentes para crear una bola de plasma, y después de haber disparado, se produce un segundo láser para hacer girar el plasma y de esta forma se crean ondas de sonido. Con el suficiente número de ráfagas láser que sean disparadas con una frecuencia correcta, las vibraciones del plasma pueden imitar el habla humana de forma realista.

Según un informe publicado por el Military Times, el uso de este tipo de energía podría calentar la piel de un objetivo hasta niveles muy incómodos aunque no llegaría a quemarla. También podría emitir ruidos que confundan al receptor, o dar órdenes de advertencia. Los sonidos que emite llegan hasta los 155 decibelios (85 decibelios es el límite en el que se comienza a provocarse daño auditivo), por lo que tendría el mismo impacto que una granada aturdidora, aunque de forma continua. Todo ello con el objetivo de someter a los adversarios sin necesidad de tener víctimas mortales.

Los creadores de este arma afirman que la señal puede atravesar el vidrio para que sea perceptible incluso dentro de edificios. Eso sí, todavía no es capaz de hacerlo con otras barreras más sólidas, por lo que todavía es una tecnología un tanto limitada.

Por otro lado, con la configuración correcta de la fuente de alimentación, un dispositivo similar se podría instalar en un vehículo pequeño y ser utilizado para el control móvil de multitudes, así como herramienta para las patrullas de policía. En un principio la versión definitiva del arma está prevista para que esté lista en cinco años.