ChatGPT, la inteligencia artificial que revolucionará internet, para bien y para mal
Esta IA desarrollada por la compañía OpenAI tiene la capacidad de acabar con las formas de trabajo tal y como las conocemos. ¿Puede hacer peligrar millones de empleos y el sistema educativo, o es la Revolución Industrial del siglo XXI?
27 Enero 2023
|La tecnología avanza a un ritmo desenfrenado. Habrá muchos inventos inimaginables ahora que estén asentados en 2030. Pero eso a muchos les da miedo, por los efectos que puede generar en su vida y en la sociedad a corto, medio y largo plazo. Y si no, solo hay que ver el revuelo que ya está generando OpenAI y su ChatGPT, una nueva tecnología de inteligencia artificial que se comunica como si fuera una persona con increíbles resultados.
El ChatGPT, de las siglas Generative Pre-trained Transformer, utiliza una tecnología basada en una red neuronal. ¿Qué significa esto? Que sus funciones están entrenadas previamente con grandes cantidades de textos y preguntas que la inteligencia artificial va incorporando para mejorarse a sí misma. De este modo, gracias a las correcciones que se van haciendo de los fallos que se cuelan en sus respuestas, se va mejorando hasta la mayor perfección posible.
Anteriormente habíamos visto diferentes inteligencias artificiales con el mismo funcionamiento, como Amelia, Replika o Cleverbot, pero ninguna había llegado al nivel de ChatGPT. Y es que esta IA es capaz de simular el lenguaje humano con muchísima más naturalidad y responder de una forma muy precisa a las preguntas planteadas, pudiendo elaborar respuestas complejas y exactas de varios párrafos y en el idioma deseado.
Hacer redacciones por los estudiantes... ¿o el fin de millones de puestos de trabajo? Las dudas que genera ChatGPT
Con ChatGPT, sacarse la carrera o cualquier estudio podría ser coser y cantar. Si te piden hacer un ensayo de un número de palabras determinado sobre cualquier tema conocido, solo tendrías que pedírselo al ChatGPT y este te brindaría una redacción con las características demandadas.
Lo podemos ver en el siguiente ejemplo: en este caso hay que elaborar un ensayo académico en inglés de cuatro párrafos comparando y contrastando las teorías del nacionalismo de Benedict Anderson y Ernest Gellner. Casi nada. Pues en cuestión de segundos, la IA ha producido texto escrito que, perfecto o no, puede pasar sin muchos problemas por el de un estudiante. Además, el texto generado podría ser solo una base sobre la que el alumno trabajase, ahorrándole así horas de documentación y redacción.
I guess GPT-3 is old news, but playing with OpenAI's new chatbot is mindblowing. https://t.co/so1TuXMQB0
We're witnessing the death of the college essay in realtime. Here's the response to a prompt from one of my 200-level history classes at Amherst
Solid A- work in 10 seconds pic.twitter.com/z1KPxiAc1O— Corry Wang (@corry_wang) December 1, 2022Lo más visto
El problema de esto es más que evidente, en el caso de seguir mejorando y acabar creando grandes ensayos, ¿cómo va a saber el profesor si lo ha escrito el alumno o si lo ha hecho una inteligencia artificial? La solución acabará pasando por hacerlo todo a modo de examen. Sin embargo, este no es el mayor contratiempo que se plantea en el campo de la educación, sino el qué moverá a los estudiantes a desarrollar un pensamiento crítico, a esforzarse y a aprender por sí mismos si se acostumbran a generar todos sus textos de esta manera.
Otra de las problemáticas que surgen del uso de una IA capaz de generar textos precisos es la de la eliminación indiscriminada de puestos de trabajo dedicados a generar contenidos, ya sea de redacción o de aspectos más artísticos. Aunque, de momento, las canciones, historias o poemas que genera no están a la altura de las producciones humanas, y tampoco es capaz de realizar una investigación periodística más allá de la revisión documental, es cuestión de tiempo que lo consiga, lo que cambiará drástica e inevitablemente muchos sectores.
Mientras tanto, Microsoft sigue invirtiendo en OpenAI
Mientras el temor, veremos si infundado o no, crece, Microsoft va camino de realizar su tercera inversión en OpenAI, la compañía que desarrolla ChatGPT. La primera tuvo lugar en 2019, la segunda en 2021 y la tercera está prevista para este 2023. La cantidad exacta no se ha dado a conocer, pero diferentes medios de comunicación aseguran que esta ascenderá a los 10.000 millones de dólares durante varios años. Esta asociación acelerará los avances de la inteligencia artificial y ayudará a las dos partes del acuerdo a comercializar esta clase de tecnologías en el futuro, según Microsoft.
De hecho, diversos modelos de OpenAI se integrarán en los productos de Microsoft para mejorar y ampliar las experiencias digitales de los usuarios. Esto forma parte de una nueva guerra empresarial entre la compañía de Bill Gates, Amazon y Google por ver quién consigue la mayor parte del pastel.
Cómo tener ChatGPT en WhatsApp
"Al igual que enviar mensajes de texto a sus amigos, ahora puedes obtener ayuda de una poderosa IA en una variedad de temas, desde el cuidado de heridas hasta la cocina y la filosofía. ¡Simplemente envía un mensaje al bot y obtén acceso instantáneo a consejos a nivel de Dios!". Con este llamativo mensaje se nos presenta la funcionalidad de incluir la IA en nuestro teléfono móvil.
Ahora se puede utilizar el ChatGPT desde nuestro Whatsapp con unos simples pasos. Lo primero sería acceder a la página oficial de God in a Box. Después registraremos un correo electrónico y un número de teléfono junto con la región a la que pertenece. Acto seguido, necesitaremos enviar un mensaje de verificación a un número de contacto que nos habrán proporcionado. Por último, se nos compartirá un link de una página en la que introduciremos nuestra edad y género para ayudar al chat a personalizar sus respuestas. Y ya está, de esta sencilla manera ya tenemos a la IA en nuestro WhatsApp. Eso sí, el límite gratuito de mensajes que le podemos enviar es de diez al mes, así que piénsatelos bien.